viernes, 12 de diciembre de 2008

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DE CRISIS Y OPORTUNIDADES

El Plenario Nacional del Partido Intransigente, reunido el día 22 de noviembre en la Ciudad de Córdoba,

DECLARA

1) Que apoyamos la iniciativa del Gobierno Nacional que logró la recuperación para el Estado Nacional de las Cajas de Jubilaciones que dejarán de estar en las manos de la especulación privada. Esta histórica medida es otro paso dado hacia los objetivos compartidos con el Gobierno Nacional de una Argentina más justa y solidaria.

2) Que ante la inestabilidad laboral ocasionada por la crisis recesiva mundial principalmente en la de la industria frigorífica, en General Motors, Mercedes Benz y otros, hacemos un llamado a todas las fuerzas políticas y sociales a cerrar filas en defensa de las fuentes de trabajo y de la producción nacional

3) Que es necesaria la inmediata puesta en marcha de un plan nacional de obras públicas continuando la recuperación de la presencia estatal que propone la Cra. Cristina Fernández de Kirchner como un avance hacia un país con una más justa distribución de la riqueza, con la recuperación de derechos laborales y sociales perdidos y en camino hacia la socialización de la riqueza, la cultura y el poder.

“Hoy ya no pueden hablar del efecto caipirinha o del efecto tequila, del efecto arroz, o del efecto que siempre denotaba que la crisis venía de los países emergentes hacia el centro. Hoy, si tuviéramos que ponerle un nombre, deberíamos decir tal vez el efecto jazz, el efecto que va desde el centro de la primera economía del mundo y se expande hacia todo el mundo. No nos pone contentos ni alegres esta situación, por el contrario, la consideramos también una oportunidad histórica para poder revisar comportamientos y políticas, porque se nos dijo a los países de la región de la América del Sur, durante la vigencia del Consenso de Washington, que el mercado todo lo solucionaba, que el Estado no era necesario, que el intervencionismo estatal era nostalgias de grupos que no habían comprendido cómo había evolucionado la economía.”

Cristina Fernández de Kirchner

La crisis mundial

Las crisis no se hacen presentes repentinamente. Son largos procesos que desembocan en expresiones de diferente gravedad. Profundos análisis las anticipan y profundos intereses suelen ignorar esos análisis. Estos últimos son, generalmente, los causantes.

Tal vez ni siquiera se necesitaba ser muy profundo para analizar la debilidad de un consumo basado en créditos baratos que eran vendidos, revendidos y nuevamente vendidos entre Bancos de Bancos que en cada venta hacían una diferencia. Hacer dinero del dinero, sin producción real, sin respaldo productivo, lo que comúnmente se denomina burbuja. Y por mas que sean transparentes, las burbujas se dejan ver, son señaladas, observadas, y siempre están quienes con la fuerza de la verdad anticipan lo inevitable, la volatilidad e indefectible desintegración de esas burbujas.

No tiene mucho sentido citar y regodearnos de viejos y nuevos análisis que anticipaban los efectos de la valorización financiera, de su predominio económico en la era neoliberal y de sus trágicas consecuencias. Que lo hayamos anticipado no nos exime de priorizar la necesidad de la búsqueda de estrategias futuras, mirando las oportunidades y atendiendo los efectos.

Tampoco se trata de profetizar un futuro incierto. Antes de la caída del Muro de Berlín y del desmembramiento de la Unión Soviética se anunció muchas veces la muerte del capitalismo. Después de aquellos hechos se profetizó el fin de la historia con una supuesta hegemonía infinita neoliberal. No es cuestión entonces de hacer anuncios grandilocuentes sobre el futuro. Pero sí se pueden ver ya en la actualidad indicios sobre determinados aspectos de la realidad mundial que es difícil que tengan vuelta atrás.

Más Estado, menos mercado; más voces, menos unilateralidad; más defensa de intereses nacionales, menos apertura; más recetas nacionales, menos recetas de organismos multilaterales de crédito. Visto así, todo junto, pareciera la concreción de muchas cosas por las que venimos luchando, concretadas por expresa incapacidad de quienes proponían y ejercían lo contrario. El problema en este caso será la constitución de fuerza social para que los beneficios de esas políticas puedan evitar su apropiación por parte de los ganadores de siempre. Las ayudas económicas a las instituciones financieras en los países centrales, de la mano del terror provocado por la crisis, no parecen ir en el mejor sentido, salvando a quienes provocaron el desastre y dejando desamparados a las reales víctimas. Pero esta historia recién comienza y hay muchos actores que aportarán su juego.

Lo que es indiscutible es que la ortodoxia económica queda absolutamente golpeada por esta crisis y solamente atina a dar explicaciones morales de sus causas. Tampoco terminan de aceptar que no se trata de una simple crisis financiera sino de una de las típicas crisis cíclicas del capitalismo, tanto de sobreproducción como de sobreacumulación de capital. Los tiempos actuales hacen que esta vez tengan características especiales. La sobreproducción se da principalmente por la incorporación de los llamados gigantes asiáticos a la producción y el comercio mundial. Lenta pero sostenidamente fueron vendiendo su producción a todo el planeta, principalmente a los mayores consumidores como EE.UU y Europa. Para ello también actuaban como prestamistas. Recordemos que China es uno de los mayores compradores de bonos del tesoro norteamericano. En cuanto a la crisis de sobreacumulación de capital su principal característica actual es que se da con una expansión territorial nueva.

América Latina y otras potencias emergentes esta vez son receptoras no generadoras de la crisis y es muy probable que no aceptarán impávidos recetas fracasadas. Estos países que crecieron contrariando el Consenso de Washington fortalecerán esa mirada ya no solamente basados en la propia experiencia sino en los fracasos ajenos. No quiere decir que en esta economía globalizada, los efectos de la crisis no lleguen rápidamente a estos países periféricos. Ya las grandes multinacionales están recortando gastos en sus filiales para que las cuentas de sus casas matrices cierren lo mejor posible. La desocupación es probable que se haga sentir en todo el mundo, aunque es evidente que los países que nos alejamos de las recetas clásicas podremos enfrentar el vendaval mucho mejor parados. Pero dependerá de nuevas previsiones que nos resten ingenuidad ante la pelea económica global. Así como las empresas industriales comienzan a desinteresarse por las filiales de los países periféricos, las entidades financieras harán lo suyo apenas tengan problemas. Más allá de alguna afinidad política, España por ejemplo tarde o temprano defenderá sus inversiones con uñas y dientes desinteresándose de los ahorros latinoamericanos depositados en sus bancos, de los trabajadores sudacas empleados en empresas de servicios españolas radicadas fuera de su territorio o de alguna que otra inversión industrial.

Es el momento oportuno para que América Latina pueda prever esas consecuencias y ejerza las regulaciones necesarias por anticipado.

Reflejos locales

En nuestro país la combinación de oportunismo político, intereses económicos y tozudez analítica intenta aprovechar el momento para desgastar cualquier intento de profundización de un modelo inclusivo. Los cuadros alineados con las consultoras, financieras y bancos internacionales, tanto en su calidad de “analistas” como quienes ya dieron el paso a dirigentes políticos, siguen repitiendo los mismos argumentos de los 90 tratando de adaptarlos a los tiempos que corren.

Por el contrario el Gobierno aprovecha la situación con un gran sentido de la oportunidad y pone fin a una de las mayores estafas al pueblo argentino: el sistema privado de jubilaciones. Decimos en un documento específico sobre el tema: “están quienes critican el momento en el que se toma la decisión, poniendo de excusa la crisis internacional como forma de frenar cualquier transformación en nuestro país. Debemos decir contrariamente que, si bien desde el PI creemos que esta decisión podría haberse tomado mucho antes, la crisis internacional la hacía impostergable y esta medida colabora incluso en la prevención de algunos efectos que ella implicará para la Argentina.” “Apelando a lo peor del individualismo de los seres humanos, la dupla Menem – Cavallo le hizo creer a sectores importantes de nuestro pueblo que sus aportes jubilatorios eran equiparables a un sistema de ahorro. Y como tal, algunos bancos y empresas, gentilmente, iban a cuidar de ellos y hacerlos crecer. Montados en percepciones históricas reales, por los desmanejos y vaciamientos de las cajas de jubilaciones, repitieron aquí su remanida muletilla de la incapacidad del Estado para afrontar sus responsabilidades, contradiciendo incluso el artículo 14 bis de la Constitución Nacional que consagra la obligación estatal en cuanto a seguridad social. Hoy, sin embargo, nos encontramos gratamente frente a la culminación de un proceso que lentamente fue revirtiendo en los últimos años aquel despojo. El Gobierno Nacional fue demostrando paso a paso su voluntad para desmontar el perverso sistema implementado por Cavallo a la vez que recuperaba la dignidad de nuestros viejos, incorporando beneficiarios y aumentando los haberes como nunca antes se había hecho”.

Más allá del tema previsional en sí, esos aportes son un ingreso que el Estado debe tener para afrontar el egreso del pago de las jubilaciones. Y por supuesto hay que decirlo: recuperarlos no solamente significa la recuperación del sistema solidario de previsión social, sino el fin de la evasión de fondos millonarios que debería recaudar el fisco y al que le costaron miles millones de dólares de deuda.

Como dijo la presidenta en el anuncio "Estamos adoptando esta decisión en un contexto internacional en donde los principales Estados integrantes del G8 y del no G8 están adoptando una política de protección hacia bancos; mientras, nosotros protegemos a jubilados y trabajadores"

La pulseada, como es habitual, no estuvo exenta de presiones, operaciones de prensa, corridas cambiarias y bancarias, especulaciones bursátiles, rumores interesados y desinformación, todo lo cual en otra coyuntura hubiese constituido un coktail explosivo lindante al golpe de mercado efectivo y destituyente de otras épocas.

Contrariando argumentos demasiados superficiales que dicen que se desaprovecharon vientos de cola, la realidad demuestra en cada intento de golpe de mercado – sucedió también durante el lokc out patronal agrario – que las finanzas públicas están bien fuertes para hacerles frente a esas intentonas y de esa forma poder imponer decisiones políticas autónomas del voto diario del mercado.

Pero también es verdad que uno de los mayores logros palpables del Gobierno como es la creación de empleo puede verse afectado prontamente. No solo será cuestión de buscar y generar nuevos mercados internos y externos, sino de acompañar en sus reclamos a los movimientos sociales y sindicales que volverán a tener en breve un nuevo protagonismo. El Gobierno Nacional y quienes lo acompañamos deberemos preverlo y ponernos de su lado. La CGT, la CTA y los movimientos de desocupados serán esenciales en la tarea de sostener lo logrado e ir por más. Las ganancias extraordinarias que tuvieron las empresas estos últimos años no justifica su estrategia del “despidoterrorismo” que comenzaron a tejer.

Situación política

Decíamos en nuestro último documento luego del “Felices Pascuas” de Cobos con su voto no positivo: “Cada vez que vivimos un momento similar al presente, en donde las corporaciones o los poderes fácticos daban algún golpe al poder político, la resolución posterior tenía que ver con el inicio infinito de concesiones, lo que terminaba debilitando a los Gobiernos y desguarneciendo a las mayorías populares. Sin embargo en este caso el Gobierno Nacional ratifica su pelea por la distribución de la riqueza y la afirmación del proyecto nacional y popular.”

Esto es reafirmado con la recuperación del sistema público provisional. También podemos mencionar la firme decisión de llevar a cabo todas las medidas necesarias para mantener el nivel de empleo cuidando las fuentes de trabajo.

Todo ello ha vuelto a fortalecer políticamente sin duda alguna al Gobierno Nacional. La acción política constante, la imposición de agenda y el manejo de los principales resortes económicos y fiscales siguen haciendo del Gobierno el principal actor de la política nacional. Esto estaba puesto en duda en julio de este mismo año, cuando muchos pensaban que a tan solo meses de la asunción de la Presidenta ya era hora de imponerle otra agenda distinta de la votada en octubre, continuidad a su vez del Gobierno anterior.

Justo es decirlo, la oposición partidaria contribuyó fuertemente a la recuperación del gobierno. Mientras los medios de comunicación ejercen la tarea de desgaste – aunque se enojen hipócritamente cuando Eduardo Buzzi lo hace explícito – los partidos y líderes de la oposición no ocultan un oportunismo militante, presos de tácticas meramente coyunturales y diarias que solamente se benefician de vez en cuando con los errores ajenos.

La comparación con estos sectores y también con Gobiernos anteriores favorece sobremanera al proyecto que apoyamos. Pero esta comparación esta siendo muy difícilmente aprovechada en el plano político por un quiebre ocasionado por la derrota en el conflicto agrario que produjo ni mas ni menos que el meollo del problema: se erosionó la credibilidad.

Será muy arduo, pero recuperarla en la mayor parte posible es la tarea fundamental. Aunque debemos ser categóricos: no se trata de hacer seguidismo con ese porcentaje de la sociedad tan maleable que muchas veces contribuyó a distintos fracasos. A este sector generalmente se dirigen los medios de comunicación, creando figuras políticas de la talla de Blumberg y de De Angeli que luego no alcanzan ni el piso electoral. Hacer política en función de ese sector sería suicida y produciría el desgaste acelerado de otros amplios sectores.

Pero la credibilidad ha sido mellada en la propia base electoral que llevó a nuestra Presidenta a lograr la mejor elección con respecto a su segundo desde 1983. Se trata entonces de fortalecer la visibilidad de nuevos actores comprometidos con este proyecto que puedan dar cuenta de la importancia del cambio iniciado y de la necesidad imperiosa de continuarlo con apoyo popular.

Amplios sectores juveniles, los intelectuales de Carta Abierta y los movimientos sociales, junto a los partidos políticos de tradición de centroizquierda o izquierda nacional y popular, debemos ocupar un rol primordial en esa tarea. Nuestra voz debe ser amplificada hoy mas que nunca en defensa de conquistas importantísimas que muchos subvaloran.

No fueron conquistas fáciles ni menores: la renovación de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, la eliminación de las leyes de obediencia debida y punto final, la recuperación de la Esma, la reducción de la deuda externa en su relación con nuestro PBI, la baja de la desocupación y la pobreza, el abandono del paradigma económico neoliberal y las recetas de los organismos financieros internacionales, la recuperación de Aerolíneas Argentinas, del Correo, de Aguas Argentinas, el no a Bush y al ALCA en Mar del Plata, la integración regional sudamericana, la reciente eliminación de las AFJPs, entre otras tantas medidas son hitos históricos que merecen reivindicarse como tales.

Nuestro aporte revolucionario de hoy debe ser sumar y multiplicar voces que colaboren con en el fortalecimiento de este proceso, porque su desgaste significará lisa y llanamente el retroceso de todos aquellos avances.

El 2009 es un año fundamental en el que la imposición de la agenda y la fortaleza de la credibilidad serán esenciales para el sostenimiento y profundización de los cambios. Si bien todavía parece muy lejano hablar de ello, es imperioso construir una nueva victoria electoral que potencie las posibilidades de éxito de un País Justo, Libre y Solidario.

22 de Noviembre de 2008

MESA NACIONAL DEL PARTIDO INTRANSIGENTE 2008 -2010

Presidente: Dip.Nac. (MC) Dr. Enrique Gustavo Cardesa (Prov. De Buenos Aires)

Vicepresidente: Tcn.Ind. Victor Omar Lemos (Prov.de Córdoba)

Vicepresidente 1°: Ing. Agr. Rafael Bonino (Prov de Mendoza)

Vicepresidenta 2°: Lic, Teresa de Jesús Arzamendia (Prov. de Formoza)

Vicepresidente 3°: Mart. Publ. Hugo Roberto Regalado (Prov. de Buenos Aires)

Secretario de Organización: Sr. Carmelo S. Prudente (Ciudad de Buenos Aires)

Secretario Tesorero : Dr. Víctor Molda (Prov. de Misiones)

Secretario Protesorero : Sr. Oscar Pfeiffer (Prov. de Catamarca)

Secretarios:

Lic. Gonzalo Tomas Pérez: (Ciudad de Buenos Aires )

Sr. Juan Cancio Acevedo (Prov. de Corrientes)

Sr. Luís Castañeira (Prov .de Santa Fe)

Prof. Tomas Ortiz (Prov. de La Rioja)

Dip. Prov. (MC) Prof. Fátima Nader (Prov. de Buenos Aires)

Sr. Eduardo Martínez (Prov. de Mendoza)

Prof. Marcelo Bravo (Prov. del Chaco)

Prof. Luís Recalde (Prov. de Formosa)

Dr. Américo R. Parodi (Ciudad de Buenos Aires)

Presidenta de la Convención Nacional : Prof. Gladis Edith Cofré (Prov. de Rio Negro)

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